Ya sé que todos los años, por estas fechas, el roscón de reyes es el protagonista de la blogosfera gastonómica, sin embargo no me he podido resistir a traeros el que hacemos en casa, homónimo del roscón de Reyes, del King's cake, o el gâteau des Rois que tan tradicionales son en medio mundo por estas fechas. Bien mirado, qué tipo de blog de cocina sería éste sin una receta tan popular como ésta. :-)
No estoy muy segura del origen de esta tradición, de lo que estoy un poco más convencida es de que el hecho de comer este dulce pertenece más a un ciclo de celebraciones del solsticio de invierno, que empezaría en el día de los santos inocentes y que culminaría con el carnaval. Como muchas tradiciones, han sido adaptadas o más bien solapadas por aquellas de origen religioso, para que, de una manera oficial, perdieran todo aquello que tenían de pagano.
Sea como fuere, lo cierto es que son muchos los paises que practican la celebración cristiana del nacimiento de Jesús el día de Navidad, y, por consiguiente, la llegada de los tres reyes de oriente. Muchos de ellos, también, con un dulce muy similar. En el sur de Francia, concretamente desde la costa azul hasta Toulouse, es típico un rosco muy parecido al nuestro con frutas confitadas, el "gateau des rois", siendo la "galette des rois", una tarta de masa de hojaldre y sin decoración, más tipica del norte (París) para éste día. En Louisiana (USA), muy posiblemente por su influencia francesa, festejan este día con el "King's cake", de aspecto muy parecido al roscón de reyes, adornado con frutas y con una figurita del niño jesús en su interior, que obliga a quien le toca, a pagar el "cake" de la semana siguiente, porque, como he comentado antes, esta celebración se prolonga hasta carnaval. En otros estados, este dulce, pierde su significado religioso y adopta más un rol de juego y festejo, donde los chicos toman el "king's cake", con el que quien encuentra la figurita es nombrado rey, y las chicas el "Queen's cake" con idéntico ritual. En grecia, y algunos paises balcánicos, celebran estos días con el "basilópita" en el que introducen una moneda, a modo de sorpresa, que concede al agraciado algún premio pactado de antemano, aunque éste último sea típico en noche vieja o el día de año nuevo. El denominador común en todos ellos es, además de las fechas, la existencia de una liturgia especial que acompaña su ingesta, no siempre relacionada con la festividad cristiana lo que demuestra, en cierta medida, su origen no religioso.
El que os traigo hoy es el tortell típico o tradicional en Catalunya en el día de Reyes. Se elabora una corona o aro en pasta de brioix, relleno de mazapán, adornado de frutas confitadas y azúcar y como único perfume, aunque opcional, el anís. En su interior debe esconder una haba y una figurita de porcelana, generalmente de un rey. En el centro debe haber una corona, normalmente de cartulina, dorada que será otorgada a aquel que encuentre la figurita, concediendole así el título de rey de la fiesta durante el resto del día. De manera simbólica este cargo obliga a los asistentes a obedecer los deseos de quien lo ostenta. A quien tenga la fortuna de hacerse con la haba debería pagar el tortell, aunque uso el condicional puesto que cuando el postre está en nuestras mesas ya está pagado. :-) También traen una tarjetita con un refrán, a modo de instrucciones, que suele rezar de la siguiente manera:
Si la fava tu hi has trobat
paga el tortell sens recança
i no perdis l'esperança
seràs un ser afortunat.
I si t'hi surt la figureta
no et quedarà més remei
que ser coronat com a Rei
d'aquesta festa distreta.
El tortell de brioix y mazapán sigue siendo el más vendido hoy en día en las pastelerías catalanas, sin embrago es una tendencia que va evolucionando en los últimos años, por parte de los pasteleros, para poder ofrecer la mayor variedad posible, por lo que viene seguido de cerca por aquellos que están rellenos de nata, crema pastelera, trufa o una combinación ingeniosa de rellenos. Y es que para gustos los colores. :-) Si os apetece probar este tortell sencillo, esponjoso y ligero que os traigo, os cuento como lo hago yo: